El joven acusado de amenazar y coaccionar continuadamente a la artista de Vila-real Paula Bonet tiene una segunda causa abierta por acoso contra otra mujer por hechos muy similares a los que presuntamente perpetró contra la ilustradora.
Asà lo ha explicado la abogada de la defensa, Carla Vall, este viernes antes del juicio que se celebra a puerta cerrada en la Ciudad de la Justicia de Barcelona por las repetidas amenazas y acoso a los que V.G.T. sometió a la pintora e ilustradora.
Preguntada por si esta otra causa paralela puede beneficiar a la ilustradora en la vista, la letrada ha explicado que no es el elemento central de la acusación al existir inequÃvocas pruebas, como los mensajes publicados, varios testimonios de la vÃctima o los policÃas.
Vall ha explicado que se trata de un hombre joven, que tiene "una vida relativamente normalizada" pero que presenta "rasgos de misoginia", y ha detallado que los forenses no han apuntado a nada que pudiera atenuar o eximir su responsabilidad.
La letrada ha explicado que han pasado tres años desde el inicio de los hechos, que está siendo muy difÃcil para la artista, puesto que se ha visto sometida "a un acoso intenso y extenso" que no se ha visto frenado ni siquiera por las dos veces en que V.G.T. estuvo en prisión preventiva.
La FiscalÃa pide para V.G.T. tres años de prisión y una multa por los delitos de coacciones y amenazas, asà como una multa de 4.800 euros por un delito continuado de quebrantamiento de medida cautelar.
La acusación particular, por su parte, pide un total de cuatro años de cárcel por los dos mismos delitos, con una multa de 8.640 por saltarse repetidamente las órdenes de alejamiento contra la vÃctima.
Según el escrito de acusación del Ministerio Público, los hechos comenzaron en julio de 2019, cuando V.G.T. se presentó en el taller de la artista con la intención de conocerla, y la abrazó súbitamente, aunque esta consiguió que se fuera.
V.G.T. se personó en repetidas ocasiones en el local, insistiéndole tanto a ella como a su alumnas que querÃa conocerla, algo a lo que la ilustradora y pintora siempre se negó.
En una de esas ocasiones, el acusado golpeó reiteradamente el cristal de la puerta preguntando por ella, levantando y bajando la persiana, y pegando sus labios al vidrio con intención de besarla.
El acusado trató de acercase a Bonet yendo a los mismos actos a los que ella iba, y también trataba de llamar su atención a través de varios correos electrónicos.
V.G.T. también redactó mensajes a través de Twitter con comentarios misóginos, en los que amenazaba a la vÃctima de estrangularla y de descuartizarla "para complacer a todos los miserables vagabundos que habitan en las calles de Barcelona".
Aunque se dictó una orden de alejamiento y comunicaciones contra la artista, el acusado siguió comunicándose con ella a través de redes sociales, en las que le decÃa que querÃa asistir a sus talleres o vertiendo mensajes humillantes contra ella.
Pese a la orden de alejamiento y que la vÃctima cambió de taller, este se volvió a personar en el local con un ramo de flores, lo que motivó una llamada a los Mossos d'Esquadra, que consiguieron convencerle de que abandonara el lugar.
La vÃctima, ante el terror, se quedó a dormir en el taller por miedo a encontrárselo acompañada de algunas alumnas, y esa misma noche lo vio aparecer intentando asomarse a la ventana para tratar de hablar con ella, lo que motivó un nuevo aviso policial.