Los jugadores del Villarreal celebran su victoria en la final de la UEFA Liga Europa que han disputado frente al Manchester United en el estadio Arena Gdansk, en Gdansk, Polonia. EFE-Kiko Huesca.El Villarreal entró en la historia de la Liga Europa al cumplir el sueño
de ganar esta competición y lo hizo con un guion imposible, ya que la final
necesitó de veintidós penaltis para resolverse de los que fueron gol los
veintiuno primeros hasta que Rulli detuvo el vigésimo segundo lanzado por De
Gea.
La emoción de los penaltis, todos convertidos menos el último, eclipsó los 120
minutos de juego en los que el Manchester United dominó hasta el minuto
noventa, pero del que se adueñó el Villarreal en la prórroga, aunque su
sustancial mejoría no fue suficiente para desequilibrar el marcador ante de los
lanzamientos.
De entrada, el equipo inglés tuvo el balón y jugó siempre de cara a la meta del
Villarreal, mientras que a este equipo le costó mucho equilibrar las fuerzas
pese a un buen juego defensivo, pero sin apenas contragolpe y solo con alguna
acción de peligro a balón parado.
El Villarreal no entró con comodidad en el encuentro, pues los primeros minutos
los manejó con solvencia el rival, a lo que se unió el golpe sufrido por Juan
Foyth, que sangró abundantemente y tuvo que abandonar el terreno de juego en
dos ocasiones para ser atendido.
Prácticamente del minuto diez al veinte, el equipo inglés jugó con superioridad
por esta circunstancia, pero el Villarreal se mostró sólido en defensa. Las
maniobras en el centro del campo de su oponente no iban acompañadas de acciones
de peligro ante la meta de Rulli. Es más, el conjunto de Unai Emery empezó a
aproximarse poco a poco a la meta de De Gea a base, sobre todo, de acciones a
balón parado.
En un par de córners lanzados por Parejo, el Villarreal puso en apuros a la
meta del conjunto inglés. Fueron la antesala del 1-0 marcado por Gerard Moreno
en el minutos 29 al anticiparse a la defensa en un falta muy bien lanzado por
Parejo.
Tras el gol, el Manchester recuperó la posesión del balón y, aunque no fue
capaz de crear verdadero peligro, sí que obligó a que el Villarreal se viera
encerrado en el área y a que en los minutos previos al descanso, aumentaran los
problemas para el equipo español.
En términos generales, el dominio del primer periodo fue para el equipo de Ole
Gunnar Solskjaer, que no dispuso de verdaderas opciones para marcar, mientras
que el Villarreal, muy seguro en defensa, sí que aprovechó la suya para ponerse
por delante, aunque se fue al descanso consciente de que si continuaba tan
cerca de su portería y no tenía el balón, iba a sufrir mucho en la reanudación.
Consciente de cómo había acabado la primera mitad, el Villarreal cambió. Suyo
fue el balón en los primeros minutos de la segunda mitad, algo que no se había
visto hasta entonces. Sin embargo, a pesar de ese cambio en la dinámica del
encuentro, un balón suelto en el área fue aprovechado por Cavani para equilibrar
el marcador.
Emery sacó a Bacca y dio entrada a Coquelin para reforzar el centro del campo,
donde al Villarreal le constaba mucho mantener el balón, ya que en el ecuador
del segundo periodo el encuentro había vuelto a la tónica de la primera parte:
dominio del Manchester, frente a la buena defensa del equipo castellonense,
pero sin presencia en ataque.
El Villarreal no encontraba la forma de acabar con el sufrimiento, mientras que
sus salidas se presentaban con cuentagotas. A favor tenía el equipo español la
consistencia defensiva, en contra los minutos que quedaban para el final y el
horizonte del del tiempo extra.
A medida que se acercaba el minuto noventa, el agobio era mayor y al Villarreal
no le quedaba más objetivo que no recibir un gol letal, porque sus opciones a
la contra se habían reducido al mínimo ante la fortaleza mostrada por el
oponente. El partido llegó a la prórroga.
Tal y como ocurrió tras el descanso, el Villarreal cobró protagonismo, se
acercó a la meta del United y dispuso de algún disparo, aunque impreciso. El
partido se había equilibrado porque la mejoría del equipo de La Plana fue
sustancial, pero no lo suficiente como para marcar el tanto definitivo.
Ficha técnica:
1 (11)- Villarreal: Rulli, Foyth (Mario Gaspar, m.88), Albiol, Pau Torres,
Pedraza (Alberto Moreno, m.88), Capoue (Raba, m.120), Parejo, Trigueros (Moi
Gómez, m.77), Yeremi (Paco Alcácer, m.77), Gerard Moreno y Bacca (Coquelin,
m.60).
1 (10) - Manchester United: De Gea, Wam-Bissaka (Mata, m.120), Lindelof, Bailly
(Tuanzebe, m.116), Shaw, McTominay (Alex Telles, m.120), Pogba (James, m.116,
Bruno Fernandes, Rashford, Greenwood (Fred, m.101) y Cavani.
Goles: 1-0, m.29: Gerard Moreno. 1-1, m.55: Cavani. Penaltis: Gerard Moreno:
gol (1-0). Mata: gol (1-1). Raba: gol (2-1). Álex Telles: gol (2-2). Paco
Alcácer: gol (3-2). Bruno Fernandes: gol (3-3). Alberto Moreno: gol (4-3).
Rashford: gol (4-4). Parejo: gol (5-4). Cavani: gol (5-5). Moi Gómez: gol
(6-5). Fred: gol (6-6). Albiol: gol (7-6). James: gol (7-7). Coquelin: gol
(8-7). Shaw: gol (8-8). Mario Gaspar: gol (9-8). Tuanzebe: gol (9-9). Pau
Torres: gol (10-9), Lindelof: gol (10-10). Rulli: 11-10: De Gea: fallo:
(11-10).
Árbitro: Clément Turpin (FRA). Amonestó por el Villarreal a Capoue y Foyth y
por el Manchester United a Bailly y Cavani.
Incidencias: final de la Liga Europa disputada en el Arena Gdansk de la ciudad
polaca de Gdansk ante 8.000 espectadores, 2.100 de ellos seguidores del
Villarreal.
Categorías de la noticia
Quizá te interese