La joven que supuestamente fue violada en Burriana
tras la Nochevieja de 2019, cuando tenÃa 17 años, ha ratificado este martes en
el juicio que fue agredida sexualmente durante horas en reiteradas ocasiones
por los dos acusados.
Estos, por su parte, han asegurado en el juicio celebrado en la Audiencia de
Castellón que las relaciones fueron consentidas y que no la retuvieron en la
vivienda en la que se cometieron los hechos. Los acusados se enfrentan a penas
de prisión de 26 años por delitos de agresión sexual, detención ilegal y
lesiones.
Los letrados de la defensa han pedido la suspensión del juicio por la no
comparecencia de tres testigos en su opinión "claves", pues eran personas que
estaban en la vivienda cuando ocurrieron los hechos, aunque el magistrado ha
acordado continuar la sesión y citarles para otra fecha de continuación.
La vÃctima ha explicado que fue a celebrar la Nochevieja a casa de unas amigas
en Burriana y después acudieron juntas a una carpa instalada por el
Ayuntamiento, y a las cinco de la mañana del 1 de enero de 2020 la joven
regresó andando sola a su casa.
En el trayecto, y mientras cruzaba un parque, fue abordada por uno de los
acusados: "Me puso la mano en la boca y no me dejaba respirar", ha explicado, y
fue por miedo por lo que le dijo al acusado que "hiciera lo que quisiera"
pero que le "dejara respirar".
A continuación, ha dicho, intentó bajarle los pantalones y finalmente ella se
desabrochó un botón, él se los bajó y, según ha relatado este martes, "empezó a
violarme".
La vÃctima ha asegurado que le dijo "que ese no era sitio", que les
"podÃan ver", porque pensó que asà le "dejarÃa ir", y fue
entonces cuando él la condujo a su domicilio con la cabeza "tapada con una
chaqueta".
Una vez allà la metió en una habitación, donde según ha dicho la violó en
repetidas ocasiones, y lo mismo hizo el segundo de los acusados, que entraba de
manera intermitente a la misma estancia.
Ella, ha asegurado, les dijo que era menor de edad, que no querÃa estar allà y
que no querÃa mantener relaciones. También ha relatado que tenÃa miedo y que
escuchó y vio a varios hombres más en la casa a los que, ha indicado, no pidió
ayuda porque habÃan visto lo que le estaban haciendo "y no habÃan hecho
nada".
Las agresiones sexuales se sucedieron durante varias horas hasta que a las once
de la mañana, ha dicho la joven, el acusado que la abordó en la calle le dijo
que se podÃa ir.
Al salir, llamó a un amigo y le dijo que la habÃan violado y este le indicó que
debÃa denunciar los hechos. Posteriormente llamó a su madre y ésta le indicó
que fueran a un centro hospitalario y a interponer una denuncia.
El primero de los acusados ha manifestado que fue la menor -a la que dice que
conocÃa- quien le abordó en la calle: "Me besó y me propuso que fuéramos a
beber". Ambos, según el acusado, fueron de la mano hasta su piso donde la
chica, ha dicho, "se desnudó", le quitó la ropa a él y tomó la iniciativa
para mantener relaciones sexuales en dos ocasiones.
Unos hechos, ha dicho el procesado, a los que no la obligó ni la forzó en
ningún momento, al tiempo que ha sostenido que "podÃa salir en cualquier
momento" de la vivienda.
El segundo de los acusados ha corroborado la versión del primero y ha
reconocido haber tenido relaciones sexuales con la vÃctima en dos ocasiones,
"pero sin intimidarla", y que pensó que ella tenÃa "24 o 25 años".
Ambos han señalado que cuando la Guardia Civil acudió a la vivienda la tarde
del 1 de enero ambos pensaron que era por un tema de papeles, ya que se
encontraban en situación irregular en España.
Durante la sesión ha declarado también uno de los hombres que se encontraban en
el piso esa madrugada, quien ha dicho que la joven entró "con una capucha" a la
vivienda y que el primero de los acusados le dijo "si él también querÃa
participar" en las relaciones con la joven.
La madre de la menor ha dicho que el dÃa 1 por la mañana, su hija la llamó "en
estado de shock y derrotada fÃsica y emocionalmente" y que tenÃa además "la
cara medio deformada".