Agentes-EPDALa operación arrancó cuando en 2020 Telefónica detectó unas páginas web relacionadas entre sí que se dedicaban a la comercialización de sus contenidos y que no contaban con el permiso ni la licencia para tal actividad. Durante la investigación, los agentes descubrieron que la organización contaba con la estructura típica de difusión de señal ilegal, con un proveedor y unos revendedores que se la facilitaban a los usuarios finales por un coste elevado.
Los detenidos están acusados de un delito contra la propiedad intelectual y contra los servicios de radiodifusión televisiva.
