Rocío Ibáñez, Alcaldesa de Altura Es por todas y todos conocida la deuda
que el Ayuntamiento de Altura acumula y que siempre condiciona el
funcionamiento de nuestro consistorio, como también es por todas y todos
conocido el punto de inflexión que al aumento continuado de la deuda supuso el
cambio de gobierno municipal en 2015.
Desde ese momento, desde junio de
2015, con muchísimo esfuerzo de quienes estamos (y han estado) al frente del gobierno municipal y
defendiendo siempre las políticas de igualdad, solidaridad y justicia social
para que las alturanas y los alturanos no vieran mermados sus servicios y sus
inversiones por la deuda municipal, estoy en situación de afirmar que en Altura
a la deuda le estamos dando la vuelta. A finales del pasado año 2021, el equipo
de gobierno que presido consiguió dar por finiquitada la deuda con la
Mancomunidad Intermunicipal del Alto Palancia, un hecho importantísimo, porque
debemos recordar que es la Mancomunidad la entidad encargada de los Servicios
sociales o la recogida de residuos entre otras cuestiones.
Respecto a la deuda viva (deuda
bancaria), en 2014 se cerró el ejercicio presupuestario con una deuda de
5.194.000 euros, mientras estamos cerrando en estos días el ejercicio
presupuestario de 2021 con una deuda viva de 3.600.000 euros, lo cual quiere
decir que vamos camino de cerrar el presente mandato habiendo hecho frente al
pago de 2 millones de euros en los últimos ocho años.
Hemos liquidado 2021 con un remanente
de tesorería para gastos generales por encima de los 450 mil euros que (una vez
más), no podrán pasar a formar parte del presupuesto de 2022 en su totalidad,
ya que seguimos haciendo frente a los más de 2 millones de euros de facturas
pendientes de aplicación presupuestaria (más conocidas como facturas del cajón)
que nos encontramos cuando cambió el gobierno municipal en 2015. Dos millones de euros de los cuales quedan
490 mil euros aproximadamente para seguir aplicando a los remanentes anuales.
Durante la campaña electoral de 2019, una de nuestras promesas electorales fue
la de terminar este mandato con nuestro Ayuntamiento dentro del índice de
endeudamiento legal, establecido en el 110%. En 2014 ese índice de
endeudamiento era de 198%, hoy es del 113%. A estas alturas, podemos estar
orgullosas y orgullosos de nuestra gestión municipal, porque llegamos para
cambiar una tendencia económica de gasto sin control y aumento continuado de la
deuda por una gestión transparente y responsable que está comenzando a dar sus
frutos en beneficio de toda la ciudadanía alturana: con mayor inversión, mejores
servicios públicos, más políticas sociales, más educación pública y cada día
menos deuda.
Cumplimos.
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