Celebración del III encuentro de Hermandad de Jubilados del Alto Mijares y Alto Palancia en Pina de Montalgrao

El pasado 26 de julio, coincidiendo con la festividad de San Joaquín y Santa Ana, día dedicado también a los abuelos, se celebró en el polideportivo de Pina de Montalgrao el III Encuentro de Hermandad de Jubilados de las comarcas del Alto Mijares y Alto Palancia.

El evento reunió a 243 jubilados de diez municipios: El Toro, Pina de Montalgrao, Villanueva de Viver, Fuente la Reina, Los Calpes, Puebla de Arenoso, Montán, Arañuel, Cirat y El Tormo . Desde primera hora de la mañana, los participantes fueron llegando en autocares desde sus localidades, siendo recibidos con entusiasmo por los anfitriones.

La jornada transcurrió en un ambiente festivo y emotivo, marcado por los reencuentros entre vecinos y amigos, muchos de ellos sin verse desde hacía años. La mañana comenzó con una entrañable actuación de la rondalla de Pina de Montalgrao, que interpretó alvadas de bienvenida con guitarras y bandurrias.

A las 14:00 horas se sirvió una paella valenciana para todos los asistentes, seguida de un animado recital de jotas tradicionales, nuevamente a cargo de la rondalla local. Varios asistentes se animaron a cantar espontáneamente, contribuyendo a la calidez y cercanía del evento.

El encuentro fue un claro ejemplo de convivencia, hermandad y participación , reflejo del espíritu comunitario que se mantiene vivo en estas comarcas a pesar del reto de la despoblación. Fue también un homenaje a quienes emigraron en su juventud en busca de un futuro mejor, y a quienes permanecieron en sus pueblos trabajando con esfuerzo en la agricultura.

Desde la organización se desean expresar públicamente el más sincero agradecimiento al Ayuntamiento de Pina de Montalgrao por su inestimable colaboración, a la Rondalla de Pina por su impecable actuación, así como a las diez asociaciones de jubilados participantes por su compromiso y con una mención especial a la Asociación de Jubilados de la localidad , por su implicación y esfuerzo. Y, por supuesto, a todos los asistentes, porque sin ellos no habría sido posible esta entrañable jornada dedicada a nuestros mayores.