Foto archivo Guardia Civil Cinco personas han ingresado en prisión al desmantelar un grupo criminal dedicado a la plantación, cultivo y distribución de marihuana con más de 3.000 plantas dentro de dos inmuebles de Aspe y Orihuela (Alicante) y un tercero de Murcia.
Según la Policía Nacional, los enviados a la cárcel por el juzgado de guardia de Novelda (Alicante) son cinco hombres de nacionalidad croata y serbia (dos respectivamente) y montenegrina, que tomaban grandes medidas de seguridad y contravigilancias, lo que ha dificultado la investigación.
El dispositivo policial de detención implicó a numerosos efectivos de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR y del Grupo de Operaciones y Respuesta (GOR) adscritos a la comisaría de Elche y medios aéreos de la comisaría provincial de Alicante. Dos de los arrestados intentaron huir al percatarse de la presencia policial, pero el gran despliegue lo evitó.
La mayoría portaban documentación falsa para intentar evadirse de la Justicia y así evitar no ser relacionados con otras actividades ilícitas.
Concretamente, uno de ellos cuenta con una orden de extradición procedente de Serbia y también le constaba una reclamación de un juzgado de Instrucción de València, ambos por delitos relacionados con tráfico de drogas.
Se llevaron a cabo cuatro registros domiciliarios y en tres se localizó más de 3.000 plantas de marihuana en avanzado estado de floración, así como diferentes esquejes en fase de crecimiento.
Estas viviendas estaban perfectamente acondicionadas y estructuradas para el cultivo y disponían de maquinaria sofisticada para mantener la temperatura adecuada para mayor rendimiento y crecimiento de las plantas, todo ello conectado ilegalmente al fluido eléctrico.
El último registro se efectuó en la casa de alquiler donde actualmente residía el jefe de la organización, lugar donde decomisaron más de 12.000 euros en metálico, diversa documentación y útiles relacionados con la supuesta venta de la sustancia aprendida.
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