"Festa de les Quintes" en la Plaza Mayor de Nules. /EPDALa Festa de les Quintes de Nules fue un auténtico éxito. La cita consiguió reunir a decenas de nuleros y nuleras en una jornada llena de tradición, color y música. La organización de este evento, que honra a todas las generaciones del municipio, ha recaído este año en la quinta del 98.
En la fiesta participaron las quintas desde el 61 hasta la 98, con una mención especial a la quinta del 99, quienes el año próximo serán los encargados de llevar adelante la festividad.
La quinta del 98, que asumió el reto de organizar este evento, logró transformar la plaza en un estallido de colores. Las blusas, pañuelos y demás elementos festivos de todas las quintas crearon un ambiente único que llenó de vida el centro del municipio.
A las diez de la mañana, la fiesta comenzó con un desfile que recorrió las calles más emblemáticas del pueblo. Desde la calle San Vicente, las distintas quintas marcharon hasta la Plaza Mayor, pasando por lugares de gran tradición como lo que antaño fue el bar de la Pelaora. El evento no solo fue un desfile de colores y música, sino también una demostración del fuerte vínculo entre quintas que caracteriza a esta fiesta.
Fiesta y gastronomía
Tras el desfile, los asistentes pudieron degustar dos de los elementos más representativos de la gastronomía local: los rollitos de anís y la mistela. La tradición se hizo sentir en cada rincón de la plaza, mientras la discomóvil comenzaba a sonar y la fiesta se extendía a lo largo de las calles cercanas al bar de la Olivereta.
Una de las grandes atracciones de la jornada fue la monumental paella que alimentó a 1.100 personas y, con el estómago lleno, la fiesta continuó con música y baile hasta las diez de la noche.
La jornada fue, sin lugar a dudas, un éxito rotundo. Según los asistentes, el evento superó todas las expectativas, consolidándose como una de las festividades más importantes del calendario local.
Desfile de quintas en Nules. /EPDA
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