Imagen de archivo de una incautación policial de cocaína. EFE
La Policía Nacional, en una operación conjunta con funcionarios de Aduanas de la Agencia Tributaria, ha intervenido en Almassora 561 kilos de cocaína procedentes de Panamà que fueron introducidos en España por el puerto de Valencia, y ha detenido a cuatro supuestos narcotraficantes.
La droga se ocultaba en el interior de seis cilindros metálicos de grandes dimensiones, entre miles de kilos de chatarra, ha informado la Policía Nacional.
En la misma operación se han intervenido 23.315 euros en efectivo, un vehículo de gran cilindrada y herramientas empleadas en la extracción de la droga, como radiales y 75 discos de corte, entre otros efectos.
La investigación se inició el pasado mes de octubre cuando los agentes tuvieron conocimiento de la llegada de cuatro contenedores sospechosos, al puerto de Valencia, a bordo de un buque procedente de Panamá.
Los contenedores llegaron a España como chatarra a principios de noviembre, con dirección de entrega en una empresa de desguaces situada en el Polígono Industrial de Almassora (Castellón).
En una primera inspección de los contenedores en el Puerto de Valencia, los investigadores detectaron que entre miles de kilos de chatarra metálica se encontraban seis grandes cilindros metálicos aparentemente macizos. Con un peso de cientos de kilos, resultaban anómalos en relación con el resto de mercancía transportada.
Ante la dificultad de llevar a cabo una inspección más exhaustiva de la mercancía debido a las grandes dimensiones y pesaje de los cilindros sospechosos, los agentes realizaron un seguimiento con el objetivo de identificar a sus destinatarios y confirmar si portaban sustancia estupefaciente.
Descarga en Almassora
Una vez que los contenedores salieron del Puerto de Valencia fueron trasladados hasta una nave, perteneciente a una empresa de desguaces, situada en el polígono industrial de Almassora.
Allí, los agentes observaron cómo el responsable, acompañado de otras dos personas, inspeccionaba y controlaba las operaciones de descarga, al tiempo que examinaba la mercancía, prestando especial atención a los seis cilindros metálicos.
Por otra parte, los agentes constataron la presencia de una cuarta persona en la nave cuya misión sería la de llevar a cabo las operaciones de extracción de cocaína del interior de los cilindros.
Finalmente, los investigadores irrumpieron en la empresa y realizaron una incisión con una radial en uno de los cilindros, confirmando que efectivamente ocultaba cocaína en su interior.
La operación ha permitido incautar 561 paquetes de cocaína, de un kilo cada uno, con diferentes logotipos. En los registros realizados en los domicilios de dos de los arrestados, en Madrid y Valencia, los agentes han localizado más dinero en efectivo y documentación relacionada con los hechos investigados.
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