Videoconferencia con Juncal Carrascosa ¿Cómo está la situación en lo referente al Covid-19 en Buñol?
En estos momentos la situación es muy buena. Tan solo tenemos un caso activo aunque la experiencia nos ha demostrado que toda precaución es poca ya que es muy fácil que todo se complique en muy poco tiempo. Por eso hay que seguir manteniendo la guardia alta, ser muy prudentes y cumplir las medidas que ya todos conocemos para protegernos y proteger a los demás.
¿Cómo está siendo el ritmo de vacunación?
Lento. Más lento de lo que nos gustaría. Los colectivos profesionales han recibido sus dosis a buen ritmo y ya están prácticamente todos vacunados. En cuanto a las vacunaciones por franjas de edad sí que pudimos hacer una minivacunación masiva para las personas mayores de 90 años con una dinámica muy buena del Centro de Salud pero el colectivo de mayores de 80 va muy lento porque estamos recibiendo los viales con cuentagotas. Por otro lado, es verdad que el Centro de Salud está trabajando para acometer una vacunación masiva con un horizonte pensado para el mes de mayo.
¿Cómo estáis gestionando la crisis desde el punto de vista económico y social?
Nosotros, de entrada, tenemos siempre recogida en el Presupuesto una partida de emergencia social importante. No solo por esta situación. Es un colchón que habilitamos siempre en las cuentas para poder atender a las personas que en un momento puntutal lo puedan necesitar. Además, el año pasado ya hicimos un esfuerzo importante reorganizando las partidas para destinar más de 100.000 euros a ayudar a las pequeñas empresas y servicios más dañados que conseguimos sacar en mayo. Cuando nos han llegado las Ayudas Paréntesis ya estábamos preparados a nivel presupuestario y no hemos tenido que aprobar ninguna modificación, como sí ha pasado en otros municipios. Esto nos ha permitido ser muy ágiles a la hora de pagar las ayudas.
Ahora estamos en una segunda fase en la que hemos recogido el resto de sectores que entendemos que también han resultado perjudicados y esperamos poder resolverla a finales de este mes.
En un año tan atípico ¿habéis abordado alguna actividad destacable más allá de las propias de gestión municipal?
La verdad es que la pandemia ha sido como una espiral que nos ha tenido completamente ocupados pero la maquinaria sigue en marcha. La crisis económica está siendo muy dura y vamos a tener que salir con ayudas, fundamentalmente, del gobierno de la nación y de europa. Con planes estructurales importantes. Pero hay también una crisis social en la que los municipios jugamos un papel trascendental. El desánimo colectivo, la desesperanza,... que tenemos que superar también. Para ello tenemos que ir poco a poco recuperando nuestra normalidad y la normalidad de Buñol no es como la de otros lugares porque somos un pueblo muy activo. Aquí hay un movimiento asociativo, cultural, deportivo y festivo enorme que se ha parado en seco y ahora hay que empezar a reactivarlo. Hay que recuperar esa normalidad con el formato seguro que estamos poniendo en práctica y que funciona bien. Pero volviendo a tu pregunta y en cuanto a los proyectos de mayor envergadura, uno de los más necesarios para nosotros es el del Conservatorio Municipal que depende del Plan Edificant y que se ha parado por la pandemia pero que tenemos que retomarlo cuanto antes. El otro, aunque nos pilla un poco más lejos, es el de la línea C3 de cercanías que tiene que mejorarse porque continuamos con una línea decimonónica que nos aleja muchísimo de Valencia a pesar de estar tan cerca. Entre otras muchas cosas.
¿En qué condiciones está la línea?
Es una de las pocas líneas que aún funciona con gasoil. No está electrificada, no tiene doble línea y llegar de Buñol a Valencia puede costar 1,15 horas cuando en coche cuesta 25 minutos. Hay buena frecuencia, pero no es un servicio útil. Nuestra línea está en las mismas condiciones que hace dos siglos. En 1883, cuando se implantó la línea, costaba dos horas llegar a Valencia... Es verdad que estamos en contacto continuo con el Ministerio de Fomento y con Adif y se han hecho algunas mejoras como la que recientemente se ha anunciado entre Buñol y Utiel pero es nuestro talón de aquiles.
Y no es el único obstáculo para evitar la despoblación que sufrís los pueblos de interior.
No, nosotros por ejemplo, pertenecemos al Hospital de Manises y no contamos con ningún tipo de transporte público directo a ese hospital que debería haberse construido en nuestra comarca (más allá de que tengan un área de gestión privatizada que es otro problema extra). Para ir al Hospital de Manises tienes que invertir un día entero ya que hay una línea de autobús que sale dos veces al día. Eso es todo. También estamos trabajando para conseguir un Centro de Especialidades bien dotado, con capacidad para abordar pequeñas urgencias y tratamiento hospitalario. En resumen, la movilidad para hacer accesible estos servicios a todos, y la recuperación de la cultura y las fiestas son nuestras grandes preocupaciones.
Sí porque hay dos cuestiones que demuestran cómo Buñol ha sabido posicionarse en el mundo: El mano a mano y la Tomatina.
Sí, lamentablemente, este año tampoco habrá tomatina porque es una fiesta en la que el contacto es parte de su esencia, así como de una activación del turismo internacional que ahora mismo no existe. Entretanto tenemos que mantener la tomatina viva para que cuando podamos retomarla, no haya quedado pasada de moda. Por eso nos esforzamos a través de las redes sociales, hemos aprovechado para reformar el Museo de la Tomatina, incorporando nuevas tecnologías y audiovisuales y seguimos dándole vueltas locas para que, aunque sea de manera virtual, mantengamos vivo ese espíritu.
En cuanto al tema de la música, nos preocupa mucho porque la tomatina tiene mucha repercusión mundial pero económicamente es mucho menor que la que tiene la música. La música es una materia económica vital en Buñol. Es una de nuestras primeras factorías. El conservatorio Municipal de San Rafael es un conservatorio referente en la Comunitat y los músicos están sufriendo mucho. La parte de la formación se mantiene con todas las dificultades pero adaptándonos pero la de la exhibición, la hemos perdido completamente. Se ha trabajado en una adaptación para pequeños formatos... Se han hecho cosas muy bonitas en este tipo de formato seguro y se van a seguir haciendo pero es que un concierto Mano a Mano reúne en un escenario a 160 músicos y eso no se ve casi en ningún lugar del mundo. No está completamente descartado pero estamos estudiándolo.
Hemos recuperado también el teatro y el cine, siempre con esas medidas de seguridad que, por suerte, se pueden celebrar en unos espacios extraordinarios, con grandes aforos y espacios al aire libre como el castillo.
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