Policía Local El primer fin de semana de cierre perimetral de la ciudad
se ha saldado con un total de 34 denuncias por incumplir las restricciones
decretadas por la Generalitat Valenciana en prevención de la covid-19. Es la
cifra de sanciones impuestas por la Policía Local en 27 controles realizados
desde las 15.00 horas del viernes 29 de enero hasta las 6.00 horas de este
lunes 1 de febrero. El dispositivo especial de vigilancia y seguridad ha supuesto
duplicar los efectivos policiales habitualmente desplegados en fin de semana para
garantizar el cumplimiento del decreto 2/2021, de 24 de enero, del presidente
de la Generalitat.
Así las cosas, los agentes han velado por el cumplimiento
del cierre perimetral desde las 15.00 horas del viernes hasta las 6.00 horas
del lunes, han vigilado que no se celebraran reuniones sociales en domicilios
privados y que los encuentros en el espacio público se limitaran a un máximo de
dos personas no convivientes, además del resto de medidas de prevención en
vigor. A raíz de los controles desplegados se han impuesto un total de 34
sanciones por no respetar las restricciones relativas al control de la pandemia
que se desglosan de la siguiente manera: 20 denuncias por incumplimiento del
cierre perimetral; 6 denuncias por reunión en un domicilio de más de dos
personas no convivientes; 6 por incumplir la obligación de utilizar mascarilla;
y 2 denuncias por no respetar el toque de queda.
La concejala de
Seguridad Ciudadana, Silvia Gómez, ha valorado de manera positiva la
colaboración ciudadana en el cumplimiento de estas medidas excepcionales ya que
“en general, salvo contadas excepciones, la ciudadanía ha respetado tanto el
cierre perimetral como las limitaciones en las reuniones”. Gómez recuerda que
este dispositivo se mantendrá en fin de semana mientras esté en vigor el cierre
perimetral decretado por la Generalitat Valenciana y ha insistido en la
importancia de que se respeten las limitaciones “porque del esfuerzo de cada
uno de nosotros depende que podamos superar estos momentos difíciles de
pandemia que vivimos”.
El despliegue de vigilancia y seguridad sin precedentes
se ha articulado en tres ejes: uso de nuevas tecnologías, controles en los
accesos y patrullas informativas por toda la ciudad, con vehículos equipados
con megafonía que han difundido las medidas y refuerzos en puntos estratégicos
como la ermita de la Virgen de Gracia. Además, se han realizado controles en
las entradas y salidas de la ciudad, alternando diferentes accesos en turnos
compartidos con la Policía Nacional e, incluso, los efectivos de la Unidad
Canina de la Policía Local para el control de estupefacientes, entre otros.
También se ha recurrido
al uso de drones en los puntos de acceso a Vila-real y en las principales zonas
verdes y de convivencia, como los jardines de Jaume I, la CEM, la Mayorazga, el
parque del Botànic Calduch y el Termet, para evitar la concentración de
personas.
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