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Ribó lamenta lo sucedido en la visita de los Reyes Magos a la plaza del Ayuntamiento de Valencia y reconoce que "al poner las vallas hicimos el efecto llamada"
Ribó ha insistido en tratar de eliminar la palabra "Cabalgata" respecto a lo sucedido en la Plaza del Ayuntamiento y ha rechazado "que el Ayuntamiento hiciera un acto para convocar a las multitudes" pese a encargar tres autobuses con vinilos y música y la actuación de varios actores
Unas declaraciones que llegan al mismo tiempo que las del presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, que ha asegurado que la fiesta no se debería haber celebrado. Sin embargo, Ribó ha insistido en tratar de eliminar la palabra "Cabalgata" respecto a lo sucedido en la Plaza del Ayuntamiento y ha rechazado "que el Ayuntamiento hiciera un acto para convocar a las multitudes", aunque reconoce que "al poner las vallas hicimos el efecto llamada". A lo que ha añadido: "tendremos que mejorar los protocolos de funcionamiento".
Su justificación choca con el propio pliego de contratación -sospechosamente un día antes de la 'No Cabalgata'-, en el que se contrataron tres autobuses con vinilos y música, así como actores y actrices para amenizar el espectáculos. También destaca otro contrato por más de 3.500 euros en adornos e infraestructura necesaria para preparar el Ayuntamiento para la llegada de los Reyes Magos y un cuarto contrato menor por 1.633,50 euros para alquiler de trajes de los Reyes. VER NOTICIA AQUÍ
El concejal de Cultura Festiva del Ayuntamiento de València, Carlos Galiana, ha asegurado que la aglomeración de personas que se produjo durante la recepción de los Reyes Magos frente al Consistorio "fue en un momento puntual" y ha culpado a la Generalitat por las aglomeraciones de hasta 1.500 personas en la Cabalgata de Reyes. El concejal de fiestas se escuda en la normativa autonómica después de las aglomeraciones provocadas esa tarde durante la visita de los Reyes.