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Infinitos personajes, astronautas, trogloditas, hawaianas,
bailarines, toreros, tuaregs, bereberes, turistas, mochos, delfines, chefs,
payasos, toreros, chinos con su dragón, una peña llegada de San Fermín,
beduinos con camellos y hasta la selección española femenina de fútbol con un
cartel de Rubiales… y así cientos y cientos de personas que hoy se han disfrazado
para recorrer la calle Mayor de la localidad de Soneja en la tradicional
cabalgata, cuyos orígenes datan cuando menos de 1896, y como es propio de uno
de los platos fuertes de las fiestas patronales, que tienen lugar en estas
fechas en honor al Santísimo Cristo de la Sangre y a San Miguel Arcángel.
El público ha respondido a la llamada y ha llenado
las aceras de la calle, disfrutando del paso de los participantes que en
grupos, familias o individualmente, se han dado cita en este espectáculo, de
colores, ingenio y música, con la presencia de una nutridísima tamborada que
abría el pasacalle y los siempre incombustibles músicos de la Banda de la Unión
Musical de Soneja que cerraba la comitiva, tras la carroza de la reina de las
fiestas y su corte de honor.
La ironía es el espíritu que aúna a todas y cada
una de las esmeradas puestas en escena, y el marchamo común que caracteriza
anualmente cada edición de este festejo que pasa por ser unos de los más
populares y participativos de la comarca.
Delfines. Fotos: Mary CalpeLa selección femenina de fútbol con la cara de Rubiales