En la primera jornada de reforestación en Bejís, se plantaron casi un centenar de árboles en una de las zonas más afectadas visualmente del municipio. Los voluntarios plantaron ejemplares de diversas especies como carrasca, almez, cornejo, madroño y sabina, los cuales fueron acompañados de un sistema de riego para asegurar su crecimiento. La actividad contó con la participación inicial de una veintena de personas, que fueron el punto de partida de un proyecto con un fuerte componente comunitario.
Durante el segundo día, el número de voluntarios se incrementó a 40, lo que permitió ampliar el alcance de la jornada. Los organizadores expresaron su satisfacción con la respuesta de la comunidad y agradecieron el esfuerzo de los participantes, destacando que el fin de semana en Bejís fue una experiencia fantástica. La reforestación se llevó a cabo en el paraje de San Cristóbal, un lugar que se está transformando gracias al compromiso de los vecinos y los voluntarios.
A pesar de los logros obtenidos, los organizadores de Oriwa, reconocen que aún queda trabajo por hacer. En los próximos días, se llevará a cabo el cuidado de los árboles plantados, la reparación de la senda y la señalización de los lugares de interés para asegurar que el proyecto siga avanzando. Además, en próximas fechas, las jornadas de reforestación se expandirán a otras localidades cercanas como Torás y Sacañet, continuando con el esfuerzo por recuperar y preservar el entorno natural de la región.