Los antiguos lavaderos de los pueblos constituÃan antaño un punto de encuentro. Era lugar de trabajo y esfuerzo para las mujeres que habitualmente se encargaban de esta tarea del hogar. Pero además de trabajo, este espacio también fomentaba la reunión, ejercÃa una función terapéutica que resultaba sanadora porque incentivaba la conversación.
Muchas ilusiones, no pocos anhelos y algún drama se han desvelado bajo el tejado de los antiguos lavaderos de la Villa de El Toro. Una techumbre que el consistorio, en su afán por recuperar la historia para forjar el mejor futuro, ha rehabilitado para poner en valor "este espacio singular, porque si para los hombres lo era el bar, para las mujeres lo eran los lavaderos. Esos eran antaño los roles que poco a poco el desarrollo ha ido cambiando".
Vidas sencillas, tal y como relata el alcalde de la Villa de El Toro, José Arenes, cuyo esfuerzo se demostraba cada dÃa en este humilde recinto "que hemos puesto en valor con todo el cariño y sentimiento que para muchos constituye esta antigua estructura".
Aquà acudÃan las mujeres casi a diario a lavar porque pocas eran, por no decir ninguna, las familias que podÃan aspirar a aquellas primeras lavadoras de turbina que poca capacidad tenÃan para lavar piezas de gran tamaño.
"Queremos rendir un homenaje a todas aquellas mujeres que hicieron de estos lavaderos un hervidero. Al que acudÃan cargadas con ropa sucia para después llevarse otra carga mayor, mojada y aclarada, hasta sus hogares. Aquà no solo acudÃan ellas, también nosotros como chiquillos pequeños. Generaciones que han compartido mucho en estas dos balsas que hoy hemos vuelto a rehabilitar porque merecÃa la pena recordar todo lo bueno que ha vivido este gran pueblo bajo este techado".
La inversión, de 36.360 euros, la consigue la Villa de El Toro a través del Plan de Compensación Eólica que le corresponde al municipio. "Vamos a seguir trabajando para poner en valor lo que fuimos, porque para emprender y crear futuro hay que conocer nuestro pasado. Y en ello estamos volcados", ha considerado José Arenes.